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Descubra cómo y cuándo recalcular la huella de GEI de su empresa
La contabilidad de GEI a nivel corporativo se trata de una contabilidad que refleja las emisiones de GEI producidas en un momento específico en el tiempo. Esto facilita el seguimiento de los resultados de descarbonización con respecto al año que ha sido establecido como base. Para poder llevarlo a cabo, la metodología y el alcance de la huella de GEI de su empresa deben permanecer estables.
Sin embargo, en algunos casos, el enfoque podría cambiar significativamente (por ejemplo, si la empresa es adquirida) y en ese caso será necesario actualizar la huella de GEI anterior de su empresa para poder realizar una adecuada evaluación de rendimiento.
Se requerirán nuevos cálculos si su empresa experimenta cambios estructurales significativos, como adquisiciones, desinversiones o fusiones, o nuevos objetivos de descarbonización, debiéndose actualizar en la huella de GEI del año base objetivo.
Los cambios estructurales requieren un nuevo cálculo porque transfieren emisiones de una empresa a otra: por ejemplo, una adquisición o desinversión transferirá emisiones de GEI existentes del inventario de una empresa hacia la otra. En estos casos, el recálculo de las emisiones del año base dependerá de la magnitud de los cambios estructurales.
Sin embargo, las emisiones del año base y cualquier dato histórico no será recalculado si la empresa crece o disminuye de manera orgánica.
Para saber si su empresa debe actualizar las emisiones de su año base será necesario desarrollar una "política de recálculo de emisiones" que articule claramente el motivo y el contexto de cualquier recálculo. La política debe definir el "umbral de importancia" aplicado para decidir sobre el recálculo de las emisiones históricas. Un "umbral de importancia" es un criterio cualitativo y/o cuantitativo utilizado para definir cualquier cambio significativo en los datos, los límites de inventario o los métodos a utilizar.
El Protocolo GHG recomienda realizar un nuevo cálculo de las emisiones de GEI del año base cuando se produzcan los siguientes acontecimientos:
Cambios estructurales en la organización que tengan un impacto significativo en las emisiones del año base de su empresa. Un cambio estructural implica la transferencia de propiedad o control de actividades u operaciones generadoras de emisiones de una empresa a otra. Mientras que un único cambio estructural puede no tener un impacto significativo en las emisiones del año base, el efecto acumulativo de una serie de cambios estructurales menores puede dar lugar a un impacto significativo. Los cambios estructurales incluyen:
Fusiones, adquisiciones y desinversiones
Externalización e internalización de actividades que generan emisiones
Cambios en la metodología de cálculo o mejoras en la precisión de los factores de emisión o de los datos de actividad que tengan un impacto significativo en los datos de emisiones del año base.
Descubrimiento de errores significativos, o de una serie de errores acumulativos, que sean colectivamente significativos.
No obstante, su empresa será libre de volver a calcular o actualizar la huella de GEI, pero únicamente a efectos de seguimiento.
Imagen: Ajuste por adquisición
Fuente: A Corporate Accounting and Reporting Standard
Imagen: Ajuste por desinversión
Fuente: A Corporate Accounting and Reporting Standard
El recálculo de las emisiones del año base también puede considerarse en el caso de que se produzcan cambios metodológicos significativos orientados a mejorar la calidad de los datos, así como en el caso de establecer o actualizar nuevos objetivos, siguiendo las directrices de la Iniciativa Science Based Targets (SBTi). Más información sobre el recálculo de emisiones en Establece el Objetivo.